viernes, 14 de mayo de 2010

Pienso, luego me como la cabeza

Hoy, como mi cuerpo flojo no me deja hacer otra cosa, pienso, bueno, más bien metapienso porque pienso en el pensamiento, valga la redundancia.

Lo primero ha sido buscar definiciones y ya ha sido impactante ver que existen múltiples y todas poco concretas.

Actividad mental no rutinaria que requiere esfuerzo. A veces puede convertirse en algo compulsivo, incontrolable y agotador. Supongo que a esto se refieren quienes aseguran que no hay que dejarse arrastrar por los pensamientos sino que hay que usarlos como una herramienta más, como una de las muchas cualidades con las que nacemos y que nos ayudan a vivir o sobrevivir.

Esta me ha encantado: lo que ocurre en la experiencia cuando un organismo se enfrenta a un problema, lo conoce y lo resuelve. ¿lo resuelve? ¿y qué pasa cuándo el problema es el exceso de pensamiento? ¿piensas en cómo dejar de pensar y así lo resuelves... o lo empeoras?

Otra: actividad y creación de la mente cuya función más importante es la de resolver problemas y razonar. Pero claro, razonar no siempre implica una consecuencia lógica; un mal razonamiento sigue siendo un razonamiento. De hecho, las falacias no son sino razonamientos lógicamente incorrectos, no válidos aunque parezcan serlo. Sin embargo, un razonamiento falaz no tiene por qué llegar a una conclusión falsa; ni un razonamiento correcto a una conclusión verdadera. Las falacias lo son por un error en su procedimiento.

Madre mía ¿dónde me estoy metiendo que ahora no sé cómo salir o a dónde iba? Bueno sí.

Queridos lectores, no abusen del pensamiento y mucho menos en su última semana de vacaciones y con problemas intestinales: la diarrea puede convertirse en mental.

4 comentarios:

  1. El organismo debe ser Sherlock Holmes*... digo yo.
    Pensar en bueno en pequeñas dosis, sino ¿qué sería de nosotros?

    Los malos razonamientos suelen ser los más divertidos.


    *Por cierto, tuve que quitar la peli de Sherlock Holmes. No la soportaba. Al final voy a ser como un beato meapilas... mecachisenlamar.

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  2. ¿Siiiii? pues a mí me gustó. Claro que no la vi como si fuese Sherlock Holmes porque mi imagen de él dista muchísmo

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  3. Si no se hubiesen llamado Holmes y Watson, vale.
    Pero es que son Sherlock y Watson.
    Ni Robert Dawny Jr. ni Jade Law se parecen... y esa pinta de ido de Holmes... no sé, no sé...

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  4. te dije que se parecían más al egomaníaco de House y al tragalotodo de Wilson

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